Valli, Aida

Nombre Aida Valli
Actividad Actriz
Lugar de nacimiento Croacia
Fecha de Nacimiento 31 de mayo de 1921
Lugar de fallecimiento Roma
Fecha de fallecimiento 22 de abril de 2006
Filmografia

Tomado de wikipedia

Alida Valli (Alida Maria Laura von AltenburgerPolaReino de Italia, hoy Croacia31 de mayo de 1921 – RomaItalia22 de abril de 2006) fue una primera actriz de cine italiana. Nacida en una familia noble, fue bautizada con el nombre de «Baronesa Alida Maria Laura Altenburger von Marckenstein-Frauenberg del Sacro Romano Imperio de la Nación Alemana».

Es recordada internacionalmente por su participación en la magistral película de 1949 El tercer hombre, de Carol Reed. Fue condecorada con los títulos de Doctora Honoris Causa por la Universidad de Roma La Sapienza, Caballero de las Artes de Francia y Caballero (Cavaliere) de la República Italiana.

Biografía

Nacida en el seno de una familia aristocrática e intelectual, su padre fue Gino Altenburger, barón del Trentino, profesor de Filosofía, y su madre fue Silvia Obrekar, pianista.

Su abuelo paterno fue el barón Luigi Altenburger (o Altempurger), un austríaco-italiano de Trento, descendiente de los condes de Arco. La abuela paterna de Alida Valli fue Elisa Tomasi, también de Trento, que era prima del senador italiano Ettore Tolomei. Por su parte la madre de Tolomei, fue Silvia Oberecker della Martina nacida en Pula (Istria, actual Croacia, en aquellos tiempos parte del Imperio Austro-Húngaro) y que fuera hermana del austriaco Felix Oberecker (u: Obrekar) de la ciudad de Laibach, (hoy Liubliana, capital de Eslovenia, pero a inicios del siglo XX, una ciudad muy germanizada de Austria).

La madre de Alida Valli fue Virginia della Martina, también nacida en Pula. El tío abuelo por linaje materno de María Valli fue Rodolfo, quien fuera amigo íntimo del italiano ultranacionalista Gabriele d’Annunzio.

Carrera

 

Alida Valli e Irasema Dilián en la película de 1941 Ore 9: lezione di chimica, de Mario Mattòli (1898-1980).

Desde pequeña le llamó la atención la interpretación, participando, desde los 8 años, en funciones de teatro benéficas. Cuando cumplió los 13 años comenzó a trabajar en el cine, a través del Centro Experimental de Cinematografía de Roma, en películas como Il capello a tre punte (El sombrero de tres picos), de Mario Camerini (1934), o I due sergenti (Los dos sargentos, (1936). En el año 1942, realizó su primera gran interpretación en la película Piccolo mondo antico (Pequeño mundo antiguo), que le valió un premio a la mejor interpretación en el Festival de Venecia.

Ese mismo año, estrenó uno de los clásicos del cine italiano de la década de 1940, el drama A través de las nubes de Goffredo Alessandrini, que adapta la famosa novela de Ayn Rand El manantial, y en el que Alida Valli realizó una de sus mejores interpretaciones, junto al injustamente olvidado, pero entonces en apogeo Fosco Giachetti.

Guerra y escándalo

Durante la Segunda Guerra Mundial dejó de hacer películas para evitar que el gobierno italiano la usara como propaganda fascista. Por ese mismo motivo hubo de esconderse, evitando así que la detuvieran. En el año 1944 se casó con el músico Oscar de Mejo, con el que tuvo dos hijos, y del que se divorció en el año 1952.

Ese mismo año se vio envuelta en el escándalo de Wilma Montesi, una joven que fue hallada muerta en extrañas circunstancias en Ostia, y que conmocionó a la alta sociedad italiana de la época, por el uso de drogas y sexo en los que estaba involucrado el hijo del ministro italiano de Asuntos Exteriores de la época, y cuya coartada fue ella. Esto prácticamente arruinó su carrera.

Hollywood

Terminada la Segunda Guerra Mundial, intentó abrirse un hueco en Hollywood, donde sólo se la conocería por su apellido, Valli. Contratada por David O. Selznick, protagonizó la película El Proceso Paradine (1947) de Alfred Hitchcock, junto a Gregory Peck y Ethel Barrymore, en un papel pensado para el regreso de Greta Garbo a la pantalla.

En 1949 protagonizó en Inglaterra la que probablemente sea su película más conocida internacionalmente, El tercer hombre de Carol Reed, junto a Orson Welles y Joseph Cotten. Terminó su estancia en Hollywood con el melodrama El milagro de las campanas (1948), de Irving Pichel, junto a Fred MacMurray, y el magnífico pero olvidado drama de escaladores La montaña trágica (1950), de Ted Tezlaff, haciendo aquí uno de sus mejores trabajos al lado de Glenn Ford.

Cine con directores europeos

 

Granger, Valli y Visconti
durante el rodaje de Senso.

Posteriormente, participó en otras películas que le dieron prestigio, ya afincándose en Europa, como la magistral Senso (1953), de Luchino Visconti, donde se enamoraría de su compañero de reparto Farley Granger; la inconmesurable El grito (1957) de Michelangelo Antonioni, junto al estadounidense Steve Cochran; la terrorífica Les yeux sans visage, (1959) de Georges Franju.

En 1960 encarna el emotivo rol de la Madre Teresa de San Agustín en la producción de Philippe Agostini y Raymond Leopold Bruckberger sobre la novela homónima de Gertrud von le FortDiálogos de Carmelitas, como la priora del Convento de Compiègne que fuese guillotinada durante la Revolución Francesa junto a otras quince monjas carmelitas. En 1961 tiene un papel menor en la comedia de ladrones El último chantaje (The Happy Thieves), junto a Rita Hayworth y Rex Harrison. Mayor enjundia tienen filmes posteriores de su historial, como una interesante versión del Edipo Rey de Sófocles (1967), realizada por Pier Paolo Pasolini, junto a Silvana Mangano y Franco Citti; el hoy clásico de terror Suspiria (1977) de Dario ArgentoNovecento (1976), y el drama de culto La Luna (1979), ambas de Bernardo Bertolucci.

Estuvo dedicada al cine hasta pocos años antes de morir, siendo una de sus últimas apariciones destacadas Un mes en el lago de John Irvin, estrenada en 1995, donde compartió protagonismo con Vanessa Redgrave y Uma Thurman. En 1997 fue galardonada con el premio León de oro del Festival de Venecia a toda su carrera cinematográfica.

Murió el 22 de abril de 2006 a la edad de 84 años.

Comentarios

Participó en el cine de evasión en la década de 1940. Logró el estrellato internacional en la década de 1950 y una espléndida madurez interpretativa en la década de 1960. Su paso por Hollywood empezó siendo prometedor pero, al igual que pasó con otras actrices europeas en esa época como Viveca LindforsMay BrittDiana Dors, tras la novedad inicial, pasó a engrosar la lista de bellezas exóticas en papeles de poca importancia. Pero, pese a que no estuvo demasiado aprovechada para el cine, es uno de esos personajes que han pasado, merecidamente, a la historia del séptimo arte.

En 1962 participó en el episodio «Doughboy» de la afanada serie de tv Combat! interpretando a Maríe, una esposa francesa.

 

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